Nuestro último viaje en familia tuvo como destino la ciudad de Roma y allí comimos unas berenjenas a la parmesana que nos encantaron. De vuelta a casa no me las quitaba de la cabeza y me puse manos a la cocina. Están riquísimas y son muy fáciles de hacer, como casi todas las recetas que voy añadiendo en este blog. Fáciles y con ingredientes que podemos encontrar en cualquier tienda de alimentación, en el super o en nuestra tienda de barrio.
INGREDIENTES:
- 2 berenjenas medianas.
- Un kilo de tomates maduros.
- Dos dientes de ajo.
- Una cebolla mediana.
- Dos bolas de mozzarella fresca de búfala.
- Queso parmesano para rallar.
- Aceite de oliva.
- Harina.
- Sal.
- Albahaca fresca o seca.
ELABORACIÓN:
1. Lavamos las berenjenas y las secamos, se parten en rodajas o como lo he hecho yo (imagen inferior), las dejamos sobre un escurridor, las salamos ligeramente para que suelten el agua y todo su amargor. Pasado un tiempo lavamos las berenjenas y secamos.
2. Enharinamos las berenjenas y las freímos en aceite, y se reservan en un plato sobre un trozo de papel absorbente.
3. Calentamos el horno a 180ºC con calor arriba y abajo.
4. Mientras vamos haciendo la salsa de tomate:
- En una sartén vamos sofriendo los ajos y la cebolla , y cuando esté pochado, le añadimos el kilo de tomates limpios y cortados en cuadraditos.
- Le añadimos un poquito de sal y azúcar si fuera necesario y para finalizar con la salsa añadiremos la albahaca.
5. En una fuente de horno ponemos salsa de tomate a continuación una capa de berenjenas, encima el parmesano rallado y después la mozzarella, y otra capa de berenjena, parmesano y mozzarella. Así hasta finalizar con los ingredientes, la ultima capa será cubierta con salsa de tomate y por encima parmesano.
6. Hornearemos durante unos 30 minutos y serviremos caliente.
Espero que la hagáis y que os guste y a disfrutar.
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